lunes, 11 de noviembre de 2013

Taller Yin y Yang dia 15 viernes de 16 a 20 horas

Tengo mucho que agradecerle a la cultura tradicional china, lo que me
ha aportado el tai chi, el chi kung, el kung fu, la medicina, son una parte tan
importante de mi vida que no podría dejarla de lado sin negarme a mí
mismo.
Por otro lado, tampoco soy un defensor a ultranza de todo lo chino o
todo lo oriental por raro y exótico; si por algo me ha beneficiado es
por su realismo y practicidad; te sirve igual seas maño, cántabro o
gaditano- o de Beijing.
Yin y yang aparenta ser algo muy simple, parecido a nuestras eternas
polaridades, bien y mal, pero es sutil y profundo. Los chinos le llaman
a ese "símbolo hippie", Tai Chi, que significa Gran Polaridad, es decir,
el positivo y negativo que mueve el universo...ahi es ná..
La teoría de Yin y Yang, cuando se profundiza en ella, aporta salidas a
nuestras polaridades internas, trabajador-golfo, ahorrador-derrochón,
tímido-extrovertido, salvaje-civilizado…..
Como occidentales, tratamos de ser solo la "buena" de las dos opciones,
sin entender que es esa actitud la que nos lleva a ir de un extremo a
otro- el péndulo si se fuerza vuelve con más fuerza para equlibrar- , o
en otros casos a funcionar "sin pilas", es decir inmovilizándose ante la
vida para no tener que tomar partido, con lo cual esa Gran Polaridad no
nos da vitalidad, sino que nos volvemos rígidos para resistirnos a la
vida y sus contradicciones, evitando vivir. Integrar las dos polaridades
y pulirse con ellas, creciendo, es un reto para los occidentales de hoy
en día, por eso el Tai Chi es tan necesario en nuestra cultura, no para
ser más orientales, sino para ser nosotros mismos.
Diego Pérez Lloría

-- Salud y Buena Práctica